El esplendor del xarel·lo
A 286 metros sobre el nivel del mar crece este xarel·lo con el vigor de una variedad que se siente en su casa. En su entorno natural, en su terreno, en su clima…
A la vista, su color amarillo pálido, limpio, brillante recuerda los reflejos dorados de los rayos de sol que lo han alimentado durante todo el ciclo.
En nariz, los aromas potentes y maduros de fruta dulce, almíbares y ligeros tostados del barril nos transportan en pocos minutos al frescor de los cítricos, a la manzana verde y a notas de lichi. Un vino blanco que evoluciona de forma espectacular en botella y donde podemos descubrir la complejidad del buqué a jazmín, laurel y pedernal.
En boca se muestra un vino blanco potente y cremoso, pero sin dejar atrás el frescor y la acidez originales de esta variedad tan enraizada en el Penedès. En definitiva, consiste en el retrato de un paisaje marcado por su singularidad, por su esplendor natural.
Reconocimientos
